Con Parker, el realizador Taylor Hackford (Oficial y caballero, Ray) se inicia en el género negro y confiesa que lo hace en gran parte por la admiración que siente por el escritor Donald E. Westlake (fallecido en 2008), quien firmó como su alter ego Richard Stark el best-seller Flashfire -que ha servido de base para el guión de esta película- y otras novelas protagonizadas por Parker, un criminal “con un código ético muy particular”: nunca roba a los pobres y procura no hacer nunca daño a los inocentes.
Aunque no es la primera vez que se adapta para el cine alguna novela de Westlake, si es la primera que los herederos del escritor han permitido que se utilice el nombre del personaje más popular creado por el escritor.
Como otras de sus historias, ésta de Parker (interpretado por el británico Jason Statham, Los mercenarios 2, antiguo nadador del equipo olímpico del Reino Unido y actor habitual en las películas del ex marido de Madonna, Guy Ritchie ) es una historia de venganza clásica: el anti-héroe, traicionado por los hombres de su equipo y dado por muerto, asume una nueva identidad para, ayudado por una mujer (Jennifer López, ¿Bailamos?, según algunas revistas de papel couché “el mejor culo del cine” y según el semanario Forbes la “persona más influyente de 2012”) que en principio ignora el papel que está jugando en la narración, conseguir hacerse con un último botín. Entre los secundarios, el veterano Nick Nolte (El cabo del miedo, Historias de Nueva York, Desayuno de campeones, Trixie), uno de los actores preferidos del realizador de culto Alan Rudolph.
Parker es el más audaz de los atracadores y exige de sus socios lealtad absoluta y escrupuloso respeto a los planes trazados. Para poner en marcha su venganza se desplaza hasta Palm Beach, donde los compañeros que le dieron por muerto planean un golpe de cincuenta millones y, haciéndose pasar por un millonario texano conoce a la mujer, agente comercial de una agencia inmobiliaria. El ladrón y la joven –cuya única aspiración en la vida es conseguir dinero para abandonar definitivamente un opresivo hogar materno, al que se ha visto obligada a volver- forman un dúo bastante convincente: él es un hombre atractivo, ella una mujer hermosa, los dos son inteligentes y su entente es únicamente “un negocio”.
“Película de serie B realizada con un cierto talento A”, según la crítica estadounidense cuando se presentó en el Festival de Sundance, Parker, que llega a los cines españoles el 8 de marzo de 2013, es un producto para amantes del género –de los géneros, el cine negro y el de acción- que entra de lleno en la “nueva moral” de Hollywood que desde hace ya algunos años permite que “los malos” escapen sin recibir el “merecido castigo” por sus fechorías.
Donald E. Westlake, autor de más de un centenar de títulos que abarcan distintos géneros, desde la novela de misterio hasta la policiaca de humor, para los que llegó a utilizar 17 pseudónimos diferentes, creó en 1962 el personaje de Parker, al que definió como “un atracador frío cínico y profesional”, protagonista de 23 novelas, la última en 2008 publicada pocos meses antes de su muerte, ocurrida a los 75 años a consecuencia de una crisis cardíaca el 30 de diciembre cuando se disponía a despedir el año en la localidad mexicana de San Pancho. Consiguió en tres ocasiones en Premio Edgar Allan-Poe y, en 1993, la Asociación de Escritores de Misterio de Estados Unidos le entregó el Grand Master Award.
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