viernes, 22 de junio de 2018

ONU: más de mil migrantes ahogados en el Mediterráneo desde enero

Viñeta de Elkoko Parrilla

En dos días, 19 y 20 de junio de 2018, y en tres tragedias distintas, más de doscientos migrantes han fallecido en el Mediterráneo central, principal ruta para quienes huyen de Africa y quieren llegar a la  Unión Europea (UE). Es una de las cifras desveladas, el jueves 21, por un comunicado del Alto Comisionado de la ONU para los refugiados, Filippo Grandi, quien se manifiesta “impactado” por los “ahogamientos masivos en Libia” y pide “una actuación internacional urgente para reforzar los actuales esfuerzos de salvamento en el mar”.

El 19 de junio, una barcaza de madera que transportaba un centenar de pasajeros, zozobró en la costa libia. Solo sobrevivieron cinco personas, que salvaron los guardacostas libios y trasladaron a Trípoli. Muchos de los cuerpos restantes están llegando estos días a las playas.
Ese mismo día, una lancha neumática con 130 pernas a bordo se hundió en otro punto de la costa libia, causando la muerte de 70 personas. Los pescadores locales salvaron a sesenta supervivientes, que fueron trasladados  a Dela (al oeste de Trípoli).

El 20 de junio, los guardacostas libios  llevaron a cabo una operación de salvamento en Grabulli. Según la ONU, los supervivientes, desembarcados en Tajoura, aseguraron que murieron más de 50 de sus compañeros de viaje.

Estas tres últimas tragedias elevan a 1.000 el número de migrantes muertos en lo que va de 2018. Una cifra que es previsible que aumente ya que las travesías del Mediterráneo aumentan siempre con la llegada del verano. 

« Las muertes trágicas nos recuerdan que las guerras y la pobreza siguen empujando a la gente a emprender viajes desesperados que pagan con su dinero, su dignidad y en fin de cuentas su vida (…) Nunca ha sido tan urgente como ahora atacar la causas profundas de esos desplazamientos, mejorar las condiciones en Libia, y en los demás países a lo largo de la ruta, ofrecer alternativas seguras y seguir salvando a la gente en el mar”.



jueves, 21 de junio de 2018

“Las guardianas”, la guerra vista desde las mujeres que sustituyen a los hombres


S
iempre ocurría lo mismo. Llegaba la guerra, los hombres eran reclamados en el frente y las mujeres tenían que sustituirlos: en las fábricas, en el campo, en las granjas… Xavier Beauvois (el realizador de “De dioses y hombres”, Gran Premio del Jurado en el Festival de Cannes), retoma este argumento y nos cuenta el conflicto desde el interior de los hogares sin hombres, donde las mujeres –“Las guardianas”- resisten multiplicando sus tareas.

 “Las guardianas”  transcurre durante la primera guerra mundial. Nathalie Baye es Hortense,  la matriarca de la granja Pardier, y Laura Smet es Solange, su hija (en la vida real, Nathalie y Laura son también madre e hija). La señora decide acoger a la joven huérfana Francine (Iris Bay) para que le ayude. La chica, que procede de la asistencia social, cree haber encontrado una familia. Pero, cuando los hombres de la granja regresan de permiso, se agitan las emociones y aparece el amor en el momento menos adecuado.

Western rural, homenaje al trabajo de la tierra, película realista y formalmente muy clásica. Un relato meditativo y desigual que vira al melodrama, adaptación de la novela homónima de Ernest Pérochon (premio Goncourt 1920), un casi olvidado escritor francés del viejo mundo rural, casi desaparecido ya y traumatizado por la Gran Guerra, que sigue con la paciencia del mundo campesino el ritmo de las estaciones y la desilusión de la joven Francine. Una historia que parece suceder fuera, o al margen, del tiempo real, sobre unas vidas suspendidas temporalmente, que repiten casi como un mantra “después de la guerra…”.

La auténtica heroína de la película, aplaudida como “una revelación” por la crítica francesa, es la debutante Iris Bay, representación de una mujer libre, víctima sacrificada por la maledicencia y los convencionalismos, y anuncio de una emancipación que iba a producirse apenas un par de décadas más tarde.


Estados Unidos abandona el Consejo de Derechos Humanos de la ONU

La embajadora Nikki Haley piensa igual que Trump

El martes 19 de junio de 2018 la delegación de Estados Unidos se ha retirado del Consejo de Derechos Humanos de la ONU (CDH), acusando a la institución de hipocresía y de estar en contra de Israel : « Adoptamos esta medida porque nuestros compromisos o nos permiten formar parte de una organización hipócrita y que sirve  sus propios intereses, y que ha convertido a los derechos humanos  en un sujeto de burlas”, ha manifestado ante la prensa de Washington la embajadora estadounidense en la ONU, Nikki Haley, a quien acompañaba el secretario de estado Mike Pompeo. “Durante mucho tiempo –ha añadido- el Consejo de los Derechos Humanos ha protegido a los autores de violaciones de esos derechos y ha sido una cloaca del partidismo político”.
Para ser totalmente fieles a la verdad, es cierta la denuncia de la embajadora Haley, respecto a que en el Consejo, que está muy lejos de ser perfecto,  han participado –y participan- países dictatoriales y reconocidos violadores de los derechos humanos, como es el caso actualmente de Azerbaiyán, China, Libia, Federación de Rusia, Irán o Arabia Saudí entre otros (aunque ella olvidó mencionar a este último, aliado de Estados Unidos) que, desde el 1 de enero de 2018, forman parte de los 107 países que componen el Consejo; pero no es menos cierto que el actual inquilino de la Casa Blanca no se distingue precisamente por su respeto de los derechos humanos, especialmente cuando se trata de migrantes, y que la última de sus medidas adoptadas -la de separar a los niños de sus padres cuando son clandestinos- ha escandalizado a todo el mundo civilizado. Solo una persona tan insensible como Trump es capaz de llevar a cabo una acción de estas características.
El anuncio de la embajadora estadounidense se ha producido justamente un día después de esas críticas, y de las efectuadas por el Alto Comisario de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, contra la política “inadmisible y cruel” de las autoridades estadounidense al separar a los niños de sus padres en la frontera mexicana. Y también de que las televisiones de todo el planeta reprodujeran el desconsolado llanto de los pequeños, llamando a gritos a sus madres desde el otro lado de una reja tupida. Unas imágenes absolutamente insoportables para todos los hombres, y las mujeres,  de buena voluntad que pueblan esta tierra.
Al parecer, y según opinión generalizada de los grandes diarios internacionales independientes, lo que ha motivado la retirada de Estados Unidos del CDH -que tiene la sede en Ginebra (Suiza) y se creó en 2006 para proteger los derechos humanos en todo el mundo, y que desde sus inicio ha contado con la repetida oposición de Estados Unidos, al no coincidir sus prioridades con las de este país- es el hecho de que en las tres reuniones anuales que celebra, Israel sea el único país que cuenta con un punto fijo (conocido como “el punto 7”) en el orden del día de cada una de las sesiones, ya que desde su creación artificial, hace más de 70 años, mantiene una ocupación de las tierras palestinas y un poder sobre sus habitantes que en más de una ocasión ha sido calificado de genocidio por las instancias internacionales. Y es que hace tan solo unos meses, y en otra de sus genialidades, el presidente Donald Trump decidió apoyar abiertamente  una de las reivindicaciones  históricas israelíes, dando por bueno que Jerusalén se convierta en la capital oficial el estado hebreo, apoyando la decisión con el traslado de su embajada desde Tel Aviv, donde se encuentra el resto de las embajadas de prácticamente todos los países que mantienen algún tipo de relación con el gobierno de Israel.
“Desde que en 2017 Donald Trump llegó a la Casa Blanca, Estados Unidos se ha retirado de la Unesco, en diciembre de 2017,ha recortado la financiación de varios de los órganos de la ONU y ha anunciado su retirada del Acuerdo de París sobre el Clima, del acuerdo nuclear con Irán y del Acuerdo de Libre Cambio Transpacífico”, recuerda la edición francesa del diario Huffington Post- lo que para Le Monde “viene a confirmar la política unilateralista y  voluntariamente aislacionista de un administración Trump que no se fía de las organizaciones internacionales”.
El abandono de Estados Unidos del Consejo de los derechos humanos tampoco es algo que ocurra por primera vez. Hace doce años, el republicano George W. Bush boicoteó al CDH; el país no volvió a participar en sus sesiones hasta la llegada al poder del demócrata Barack Obama.


“El orden divino”, el despertar del feminismo en Suiza


El orden divino, ganadora del premio del público a la mejor película de ficción en el Festival de Cine de Tribeca 2017, y también de los premiosa a la mejor dirección y la mejor actriz, transcurre en 1971 en Suiza, donde, a pesar de las revueltas sociales que se suceden en la década anterior en todo el mundo, se sigue negando a la mujer su derecho al voto.

Una historia que era necesario contar para recuperar la memoria y saber que en lo que hoy es uno de los países occidentales punteros en la defensa de los derechos humanos, en la Suiza donde los ciudadanos deciden sobre su futuro varias veces al año en referéndum (también es un paraíso fiscal, pero esa es otra historia), tan  cerca como hace cuatro décadas, se “concedió” a las mujeres el derecho a votar, en un referéndum en el que, naturalmente solo pudieron opinar los hombres. Los mismos hombres que hasta entonces habían conseguido incluso que sus mujeres manifestaran en voz alta que las cosas debían seguir como hasta entonces.

“El orden divino” es una historia tierna y delicada sobre un puñado de mujeres que organizaron una “huelga de esposas”, abandonando sus hogares mientras llegaba el día del referéndum, y se esforzaron lo que no está escrito para convencer a los maridos no solo de la necesidad de devolverles un derecho fundamental, sino también de que aceptaran la modernidad que avanzaba a pasos agigantados fuera de sus fronteras y se avinieran a participar en las tares caseras, como condición sine qua non para recuperar el derecho a disfrutar de una compañera.      
 
En 1971, las mujeres todavía no podían votar en Suiza. Nora es una joven ama de casa y madre de dos hijos que vive en un pintoresco pueblo. Es una persona tranquila que cuenta con la simpatía de todos. Cuando su marido le prohíbe aceptar un trabajo a tiempo parcial, la frustración le lleva a convertirse en el paradigma del movimiento sufragista de su ciudad. Su nueva fama conlleva humillación, amenazas y el posible fin de su matrimonio, pero ella se niega a dar marcha atrás y convence a las mujeres del pueblo para ir a la huelga mientras descubre aspectos sorprendentes sobre su propia liberación. Las tranquilas  vidas de sus vecinos se verán afectadas por completo.
 
Festivales como Woodstock, el Flower Power y la revolución sexual han abierto la puerta al feminismo militante: han transcurrido tres años desde mayo del 68 pero la ola de liberación femenina no ha llegado al pueblecito suizo de  Appenzell. A medida que Nora propaga sus ideas en el pueblo se va instalando un deseo de cambio que alcanza incluso a los más recalcitrantes.  

« El orden divino » es un homenaje a las militantes que lucharon en uno de los últimos países occidentales que concedió el derecho de voto a las mujeres, medio siglo después de que las primeras sufragistas lograran sus objetivos a los dos lados del Atlántico.  Un relato que tiene como eje un personaje femenino verdaderamente entrañable, y que aborda con sensibilidad y humor algo que inicialmente parecía improbable: la liberación de las mujeres suizas de las tres “k” (Kinder, Küche, Kirche , “niños, cocina, iglesia”), que las seguía atrapando con un siglo de retraso.

Una película que nos habla de muchas mujeres de hoy a través del relato de  las luchas de las mujeres de ayer, en un rincón del mundo donde se escribía, y se creía, que “una feminista es una mujer que quiere ser un hombre”.  

Ahora, desde la perspectiva de lo que el feminismo más serio define como “la cuarta ola” de sus objetivos, la que se propaga por Internet y deja con las vergüenzas al aire a todos los Weinstein y otros depredadores sexuales que aprovechan sus posiciones de poder para forzar a las mujeres que dependen de ellos  (en casa, en el trabajo…), nos llega esta película que muestra como la muy conservadora Suiza tuvo que esperar hasta “la tercera ola” para que sus habitantes (varones) se decidieran a conceder a sus mujeres el derecho fundamental a votar.

“El orden divino es una película modesta, pero honrada y muy sincera, y sobre todo dotada de un plus de valor documental que consigue sin esfuerzo que “pase el mensaje”. Este es el segundo largometraje de la realizadora y guionista suiza  Petra Biondina Volpe, de 48 años, conocida por sus anteriores cortos, premiados en festivales de cine independiente y dedicados  a los nuevos valores emergentes de la cinematografía.




El gigante japonés de la cerveza ha financiado la masacre de los rohingyas, denuncia Amnistía Internacional


Una filial de la multinacional japonesa Kirin, productora de cerveza, hizo una donación , a finales de 2017, al ejército y las autoridades Myanmar coincidiendo con la campaña de limpieza étnica contra la minoría rohingya, denuncia Amnistía Internacional France (AI).
La Kirin Holdings Company, Inc. ha confirmado que, entre el 1 de septiembre y el 3 de octubre de 2017,  su filial  Myanmar Brewery efectuó distintas donaciones por un valor total de 30.000 dólares estadounidenses a las autoridades de Myanmar. “Japón –dice AI en su comunicado- Tiene la responsabilidad de vigilar que sus empresas no contribuyan a violar los derechos humanos allí donde lleven a cabo sus actividades.  Debe, por tanto, investigar inmediatamente sobre estos datos”.   

Según la multinacional Kirin, las donaciones iban destinadas a ayudar a las víctimas de la violencia. Sin embargo, según la información recogida por AI, la primera de ellas llevaba remite de Myanmar Brewery e iba dirigida al comandante en jefe de los ejército de Myanmar, el general Ming Aung Hlaing.

Posteriormente, Kirin confirmó otra donación, de 6.000 dólares, dirigida al mismo general quien ha declarado que “el dinero recibido irá en parte a los miembros de las fuerzas de seguridad y al personal de los servicios del estado, desplazados al estado de Arakan, donde han arriesgado su vida en la defensa nacional”. Precisamente la zona donde se ha estado exterminando a la minoría musulmana de los rohingyas. Lo que obliga a recordar que “ningún inversor internacional puede hacer donaciones al ejército de Myanmar en el momento en que sus fuerzas armadas proceden a una limpieza étnica de la población rohingya en el norte de Arakan. Reconocerlo equivale a dar la razón a quienes afirman que Myanmar Brewery apoya la actuación del ejército contra esa minoría”

« Disponemos –continúa el comunicado de AI- de elementos y pruebas que nos permiten asegurar que ese dinero ha ido a parar al ejército de Myanmar: la cervecera japonesa ha reconocido que su filial hizo tres donaciones coincidiendo con las reciente violencia que sacudió el estado de Arakan;  un oficial del ejército fue grabado en el momento de recibir una de las donaciones que, según él, iba destinada a ls fuerzas de seguridad; y, finalmente, Kirin reconoce ignorar cual ha sido el destino final de las cantidades donadas”,
Además, las donaciones se efectuaron justo en el momento en que los medios de comunicación de todo el mundo dedicaban sus primeras páginas y portadas a las informaciones sobre las atrocidades cometidas por las fuerzas de seguridad de Myanmar con mujeres, hombres y niños rohingyas que  huían a Bangladesh en cantidades estimadas por encima de las 690.000 personas, atrocidades que el 11 de septiembre de 2017 el Alto Comisario de Naciones Unidas para los Derechos Humanos calificó de “ejemplo clásico de limpieza étnica” , y los investigadores de AI  de “crímenes contra la humanidad”.

Las fuerzas de seguridad de Myanmar han utilizado incluso minas terrestres, prohibidas por el derecho internacional, a  lo largo de la frontera, lo que llevó al gobierno de Bangladesh a denunciar  a las autoridades de Myanmar

Ateniéndonos a los términos de los principios  que rigen la ONU relativos a las empresas y los derechos humanos, « Kirin tiene obligación de respetarlos, y vigilar para que sus actividades no den lugar ni contribuyan a que se produzcan violaciones de dichos derechos. Las empresas deben identificar y evaluar su impacto real sobre los derechos humanos en los lugares donde ejercen sus actividades”.


viernes, 15 de junio de 2018

“El repostero de Berlín”, melodrama bisexual (y bicontinental)


Un especie de love story agridulce para contar con delicadeza no exenta de sensualidad, la historia  triste y parece que con tinte autobiográficos, de ese pastelero (The cakemaker) de Berlín, que es la ópera prima del realizador alemán Ofir Raul Graizer, conocido ya del público cinematográfico internacional por su cortometrajes “La discoteque”, “A prayer in jnuary” y “Dor”. L película lega a las pantallas españolas trs pasar por la sección oficial del Festival de Karlovy VaryTras y su presentación en el útimo Festival de San Sebastián. 

Protagonizada por Sarah Adler (Foxtrot, 2017; Nuestra música, 2004), Tim Kalkhof (Homeland, 2015) y Zohar Strauss (María Magdalena, 2018; Lebanon, 2009)  "El repostero de Berlín" nos adentra en la vida del pastelero alemán Thomas que mantiene un romance con Oren, un joven hombre de negocios israelí que vija con frecuencia a Berlín.  Tras enterarse de que Oren ha muerto en un accidente de tráfico, Thomas decide dar un vuelco a su vida y viajar a Jerusalén en busca de respuestas. Con una identidad falsa, se cuela en la vida de Anat, la viuda de su amante, que tiene una pequeña cafetería khoser. Empieza a trabajar para ella haciendo tartas y pasteles innovadores, que devuelven la vida al local.

Película dulce y emotiva. “Tragedia bisexual en la que cada hombre tiene una mujer y un hombre, y la mujer dos hombres” (Luc Chessel, Libération).

Canto a la libertad, al deseo y al amor loco y subversivo, y crítica sin piedad de los fundamentalismos. Pese a tener un guión bastante previsible, la fuerza de la historia reside en la inteligente serenidad con que Anat, la viuda, se mueve entre la ortodoxia de un hermano que no consigue imponer su autoritarismo y su deseo de libertad “ganada a pulso”, y en la audacia de los diálogos.

Con un poco de interés, también podemos aprender a hacer una tarta selva negra.







jueves, 14 de junio de 2018

Una sombra sobre el mundial de fútbol : el realizador ucraniano preso Oleg Sentsov lleva un mes en huelga de hambre

Protestas  a favor de Oleg Sentsov en la Berlinale 2016

El día en que comienza en Moscú el Mundial de fútbol, el realizador ucraniano Oleg Sentsov inicia su día 30 de huelga de hambre, en una colonia penitenciaria rusa donde cumple desde 2015 una condena de veinte años por “terrorismo”, tras un proceso que sus defensores calificaron de “estalinista” y Amnistía Internacional y el presidente de la Academia Europe de Cine, Mike Downey, de “farsa” . Con la huelga de hambre pretende no solo conseguir su libertad sino también la de todos los demás presos políticos en Rusia.
Oleg Sentsov, de 41 años,  es realizador, guionista y productor ucraniano nacido en Crimea.  Militante en contra de la anexión de Crimea por Rusia, muy activo durante las manifestaciones de la Euromaidan ( nombre dado a los disturbios de índole europeísta y nacionalista en Ucrania, que en el momento álgido derrocaron al presidente electo Viktor Yanukovich, del Partido de las Regiones. Los disturbios comenzaron en Kiev la noche del 21 de noviembre de 2013, promovidos inicialmente por estudiantes universitarios, a los que se fueron sumando amplios sectores de la población, la oposición política, las iglesias ortodoxas oficiales y representantes de minorías étnicas: rusos, tártaros, judíos, armenios…así como ciudadanos polacos, bielorrusos, georgianos y rusos). Detenido en mayo de 2014 por el Servicio federal de Seguridad de la Federación de Rusia, acusado de “preparar actos terroristas”, en agosto de 2015 fue condenado a 20 años de reclusión.
Oleg Sentsov es uno de los 70 prisioneros ucraninos en Rusia, como consecuencia del conflicto entre ambos países. Su caso es especial no solo porque se trata de un reconocido cineasta, sino porque ha conseguido concitar mucho apoyo, tanto en Rusia como en el extranjero, y porque no se descarta que, de continuar con su huelga de hambre, pudiera ocurrir algo irreparable durante el mes que dura la competición futbolística, o que sería un baldón para el presidente ruso que prepara su reelección.
La publicación digital “Los nuevos disidentes” ha iniciado en Change.org una petición, dirigida al Presidente de la Federación de Rusia Vladimir Putin, y a “todos los que aman el cine, el fútbol y la democracia…o al menos una de estas tres cosas”, en la que recuerdan que en Rusia la prensa libre es una excepción y no la regla, que los partidos de oposición se ven continuamente acosados y perseguidos, que la censura impera en el terreno artístico y que las personalidades de la oposición, como fue el caso de Boris Nemtsov en 2015, han sido asesinadas: “El mundo del cine, incluso en Rusia, reclama la libertad de Oleg Sentsov, injustamente condenado…El momento de la gran fiesta del fútbol es el de devolverle su libertad”.

“Los 50 son los nuevos 30”, otra vuelta de tuerca al amor entre seniors


“Los 50 son los nuevos 30” (Marie-Francine), es una comedia romántica francesa, escrita, dirigida y protagonizada por Valérie Lemercier (“¡Palacio Real!”). Le acompañan en el reparto de esta fábula bastante banal a la que no falta un toque de sátira social, Patrick Timsit (“El soplón”), Hélène Vincent (“Samba”), Philippe Laudenbach (“De dioses y hombres”) y Denis Podalydès (“El buen maestro”).

Demasiado mayor para un marido que la deja por otra mujer más joven, de sobra en el laboratorio donde trabaja, y del que la despiden,  Marie-Francine vuelve, a los 50 años,  a casa de sus padres, que siguen tratándole como si fuera adolescente y le animan a abrir un pequeño negocio de cigarrillos electrónicos. Deprimida al máximo, fumando como un carretero tabaco de verdad mientras es incapaz de vender los cigarrillos sucedáneo, allí conocerá al  portugués Miguel, un cocinero que se encuentra en idéntica situación que ella. A pesar de que todo parece estar en contra, la pareja intenta vivir un amor nuevo y rejuvenecedor…

Los críticos franceses, que no pueden negar que les pierde su pasión por las glorias nacionales (Oh,la,la,la… siempre “la France”, “la grandeur de la France), han alabado este largometraje centrándose en el “divertido universo” de la autora y protagonista, Valérie Lemercier, a la que se le reconoce talento como creadora de sátiras, y olvidando todo lo demás: narración carente de sentido, desarrollo caótico de la trama.

Siempre es un desafío escribir para una pareja romántica que ya ha doblado el cabo de la mitad de la edad previsible. Muchos realizadores han intentado ganarle la batalla al tiempo, sin conseguirlo. Tampoco Lemercier. Y eso pese a que, a simple vista, cada vez debería ser menos difícil conseguirlo, toda vez que –en la vida real- cada vez tenemos más noticias de parejas “mayores”, e incluso muy mayores, que están viviendo un renacimiento amoroso gracias a su encuentro en el centro social, en la residencia o en las páginas de contactos de Internet.

En todo caso, “Los 50 con los nuevos 30” es una película con nostalgia de la vida familiar tradicional –“infernal y tierna”- aunque muy local, con referencias culturales muy francesas, con pasajes retro –los paraguas de Cherbourg, Sylvie Vartan, Nana Mouskouri- difíciles de descifrar por el público de otras latitudes.






lunes, 11 de junio de 2018

España ofrece el puerto de Valencia como refugio para el Aquarius

El gobierno español acogerá a los 629 migrantes y refugiados que viajan en barco de SOS Mediterranée


El Aquarius protegiendo una barcaza de migrantes

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dado instrucciones para que España acoja en el puerto de Valencia al barco “Aquarius”, de la organización humanitaria SOS Mediterranée, que desde las 0h35’ de hoy, 11 de junio de 2018, se encuentra en “stand by” a 35 millas náuticas e Italia y 27 millas náuticas de Malta, por orden del ultraderechista ministro del Interior italiano, Matteo Salvini (Liga Norte), según ha informado el Centro Italiano de Coordinación de Socorros marítimos  (IMRCC). "Es nuestra obligación ayudar a evitar una catástrofe humanitaria y ofrecer un puerto seguro a estas personas", asegura Pedro Sánchez

En el “Aquarius” se encuentran 629 migrantes llegados de Africa, rescatados en el mar por SOS Mediterranée y atendidos por personal de Médicos sin Fronteras, entre los que hay 123 menores no acompañados, 11 niños pequeños y 7 mujeres embarazadas, todos ellos rehenes de un contencioso internacional que les sobrepasa.  La tripulación del “Aquarius” ha informado de que solo disponen de víveres para este día.

El domingo, 10 de junio, a mediodía, se encontraban en ruta hacia el puerto siciliano de Messina cuando una información aparecida en la versión digital del diario La Repubblica explicaba que el vicepresidente del Consejo y ministro del Interior había decidido negar al “Aquarius” la entrada en todos los puertos italianos: en las redes sociales, la apalabra clave ha sido “chiudiamoiporti” (cerremos los puertos), acompañado de una especie de conminación a Malta, para que desembarquen allí: “El puerto más seguro es el vuestro”.

Salvini –quien desde antes de su llegada al poder  había hecho famoso su axioma “Para los emigrantes se ha terminado la buena vida”- se ha permitido incluso una especie de broma, del peor gusto, al afirmar que quiere “que los niños africanos sean felices en Africa y los niños italianos sean felices en Italia”.

Inmediatamente después, las autoridades de Malta han anunciado que los pasajeros del “Aquarius” tampoco pueden desembarcar en sus costas, con la excusa de que este tipo de operaciones están coordinadas con un protocolo desde Roma, y el añadido de que a ellos nadie les obliga a hacer lo que no quieren.
Según la información del diario Le Monde, la intervención del Aquarius comenzó el sábado 9 por la noche cuando el IMRCC, alertado por los aviones de la misión Eunavfor Med (European Naval Force Mediterranen) de lucha contra el tráfico de migrantes en el Medierráno, pidió al barco humanitario que pusiera rumbo a una zona situada a varias decenas de millas de las costas libias, al este de Trípoli, donde había dos embarcaciones en peligro.  El salvamento fue muy peligroso, la segunda patera zozobró y los 40 migrantes que la ocupaban fueron « repescados in extremis ».
Horas más tarde, el IMRCC de Roma pidió al “Aquarius” que efectuara cuatro trasbordos: sucesivamente fueron llegando al barco al barco 119 solicitantes de asilo socorridos en el mar por un barco comercial, y los migrantes rescatados por tres barcos de los guardacostas italianos. En las primeras horas el domingo, el IMRCC pidió al barco de SOS Mediterranée que pusiera rumbo al norte. “Todo sucedió –sigue la información de Le Monde- como si autoridades italianas hubieran intentado “llenar” lo más posible el “Aquarius” para permitir que el ministro Salvini, entrado en funciones una semana antes, pudiera escenificar su firmeza frente al “business” de la inmigración”, uno de sus temas recurrentes de denuncia desde hace años.
Salvini ha recibido enseguida los apoyos de la derecha. La jefe del grupo Forza Italia (Berlusconi), Anna Maria Bernini,  he escrito que “es hora de que los otros estados de la UE, incluida Malta, cumplan con su parte”; más virulenta, Giorgia Meloni, jefe de filas de Fratelli d’Italia (postfascistas) sugiere que se obligue al “Aquarius” a ir a Italia, para que el gobierno lo secuestre y denuncie a sus tripulantes por “tráfico de seres humanos”.  Los primeros gritos de indignación no han llegado, como sería de esperar del Partido Democrata (PD, antiguos comunistas reconvertidos), sino de los alcaldes de Nápoles, Palermo, Messina y Reggio Calabria (“figuras inclasificables del campo progresista”), que se han ofrecido a “abrir sus puertos”.
A mediodía del lunes 11, según la información de El País, el Presidente e la Generalitat Vlencian, Ximo Puig, ya se había manifestado dipuesto a acoger a los 629 migrantes y refugiados del “Aquarius: "Es nuestra obligación ayudar a evitar una catástrofe humanitaria y ofrecer un puerto seguro a estas personas, cumpliendo de esta manera con las obligaciones del Derecho Internacional". Y ha añadido que el Gobierno de España ha ofrecido a la ONU Valencia como "puerto seguro". El domingo por la noche, los alcaldes de Barcelona y Valencia, Ada Colau y Joan Ribó,  ya se habían ofrecido para acoger  a los rescatados por el barco de SOS Mediterranée en sus respectivas ciudades.



domingo, 10 de junio de 2018

Ray Charles, el “genio”


Para recordar y rendir homenaje a un gran músico, 14 años puede ser un aniversario como cualquier otro. Mi amigo Xulio, dibujante de excepción pero antes cantautor,  quería una oportunidad- acariciada largo tiempo- para dibujar a Ray Charles. Y a mí, es fácil convencerme: si todos los días son el día de la mujer trabajadora o de la defensa del medio ambiente, todos los 10 de junio pueden perfectamente ser el aniversario del genio del Rhytm’n blues.

Ray Charles, pianista, organista, compositor y director de orquesta y, sobre todo, figura legendaria con lugar propio en el mundo de la música, murió el 10 de junio de 2004 después de cinco décadas de éxitos incontestables, dejando para la historia una carrera musical fecunda y diversa, en la destacan decenas de « clásicos” que han dado la vuelta al mundo y han servido de inspiración a varias generaciones de artistas. Como sucede a menudo, detrás de su imagen legendaria está la trayectoria vital de un hombre que tuvo que sobreponerse a sus carencias y a algunos dramas personales. 

Ray Charles (nacido como Ray Charles Robinson), apodado “el genio” por Frank Sinatra, es una de las grandes figuras del Rythm’n blues, uno de los fundadores de la música “soul”, que es lo mismo que decir música con alma y, en la época de la segregación racial en Estados Unidos, el cantante preferido de un público que no distinguía de colores y se emocionaba con sus canciones de inspiración jazz, country y blues.

 A los cinco años Ray Charles presenció la muerte de su hermano menor, George, ahogado accidentalmente en una lavadora manual. Un año después, a Ray le diagnosticaron un glaucoma que, en pocos meses, le dejó completamente ciego. Estudió en la Institución San Agustín, para sordos y ciegos, de Florida, donde aprendió orquestación así como a tocar varios instrumentos: piano, órgano, trompeta, clarinete y saxofón. No solo es multi-instrumentista, es también practicante de distintos géneros musicales, aunque muy pronto se  decanta por Chopin, en música clásica, y Art Tatum en jazz. A partir de 1945 crea su propio trío en Jacksonville (Florida, todavía cerca de la familia) y frecuenta los clubs de la región, donde ofrece conciertos en los que mezcla góspel, blues, jazz y country.
Con solo 17 años decide emanciparse, se instala en Seattle, y debuta en los grandes clubs de la zona como cantante acompañado de su propia orquesta. En 1949 graba el primer disco que lleva su nombre – Ray Robinson- en la carátula. Son años prometedores: conoce a Quincy Jones, firma un contrato con la compañía Swing Time Records y en 1951 produce “Baby, Let Me Hold Your Hand”, un 45 r.p.m. que asciende rápidamente en las listas del R&B. Desde su debut hasta 1963 produce 15 álbumes y compone gran cantidad de canciones. De la fusión de jazz, country, R&B e incluso góspel, nace el “Soul”, que coloca a Ray “Robinson” Charles, la leyenda con gafas negras, entre los grandes intérpretes de la década de 1950: la mezcla de “deseo sexual y liturgia” que imprime a sus interpretaciones, gracias también al poyo de sus coristas negras, The Raelettes, le convierte en una estrella del panorama musical, primero en Estados Unidos e inmediatamente después en Europa. En el mundo triunfa el swing, luego llegan el rock and roll  y la música pop angloamericana. “Ray Charles deja pasar las corrientes, las absorbe, las fusiona e inspira a tres generaciones de músicos (…) Cuarenta años más tarde, 12 Grammys y cientos de millones de discos vendidos » (L’Express, 1999). 
Es entonces, y para evitar confusiones con un famoso boxeado de la época llamado también Ray Robinson, cuando cambia definitivamente su nombre por el de Ray Charles. Y es entonces también cuando empiezan a llegar los grandes éxitos internacionales: “I Got A Woman”, “The Right Time, “What I Say”, “Georgia on My Mind”, “Unchain my Heart…el álbum “The Genius of Ray Charles” (1959) y la creación de su propia productora “Ray Charles Enterprises” (1963). Cuando se niega a actuar en una sala de Georgia,  causa de la ley de segregación, le prohíben actuar en todo el estado. Llegado más tarde el fin de la segregación, el gobierno de Georgia le presentó sus excusas en público y eligió su versión de la celebérrima canción “Georgia on My Mind” (escrita en 1930 por Hagy Carmichael y Stuart Gorrell) como himno oficial.
« Melodies bring memories ». O algo así como que la música suele estar asociada a los recuerdos, que tiene el sorprendente  poder de reenviarnos a otros espacios, con frecuencia lejanos, y a otros tiempos. La canción « Georgia » es sobre todo « una forma acústica que une pasado y presente, una forma precisa que cumple una función de referencia, y que incluye todo un contexto visual (pétalos, pinos, claro de luna… » (Georgia On My Mind de Ray Charles
Bernard Lortat- Ed. Jacob 2006)

A pesar de que la crítica y el público le miman, o quizá por ello, Ray Charles cae en la dependencia de la heroína, y tras graves y sucesivas enfermedades es forzado por sus allegados a hacer una cura de desintoxicación. Desde entonces, y hasta el final de sus días,  arrastró una grave enfermedad hepática.
Regresa en 1966, pero en las dos décadas siguientes solo consigue pequeños éxitos puntuales. Aprovecha esa pausa para publicar su autobiografía: “Brother Ray” (1978). La entrada, en 1986, en el Rock’n’Roll Hall of Fame, y las apariciones en televisión durante los años 1990 y 2000 le devuelven el interés de un público que le había abandonado, y desde entonces y hasta su muerte en 2004, a los 73 años, continuó haciendo giras de conciertos por todo el mundo. “De él se decía que podía cantar la guía telefónica. En efecto, transformó el gospel en canción de amor, el country en gospel, el gospel en blues (…)Ray Charles era ese extraño cocinero que, a partir de producciones mediocres de las variedades estadounidenses, e internacionales, podía servir obras maestras. Un alquimista que transformaba lo común en bello…”.

La última vez que apareció en un escenario fue el 30 de abril de 2004, en el Teatro Griego de Los Angeles, festejando su concierto número 10.000, junto a Clint Eastwood. Acababa de grabar un álbum de dúos –titulado “Genius Loves Compagny”- junto a Norah Jones, B.B. King, Steve Gander, Van Morrison y Willie Nelson, entre otros. En febrero de 2005, ese disco recibió ocho premios Grammy, entre ellos el de la mejor grabación del año. El mismo año se estrenó el largometraje sobre su vida, “Ray”, dirigido por Taylor Hackford e interpretado por Jamie Fox, que ganó el Oscar al Mejor Actor. 



sábado, 9 de junio de 2018

“En tiempos de luz menguante”, el otoño del camarada


Si falta el pan podremos comer patatas. Si se acaban las ideas, ¿qué hacemos?”

Dirigida por el novel Matti Geschnnoeck y protagonizada por el suizo Bruno Ganz (“El escritor”, “Lutero”, “Pan y tulipanes”),  “En tiempos de luz menguante” está basada en la espléndida novela homónima de Eugen Ruge (publicada en España por Anagrama).
Como una ampliación de aquella fiesta de cumpleaños que organizaban sus hijos a una madre del este alemán que no podía saber que el muro había caído (“Goodbye Lenin”), esta película -en el otoño deBerlín 1989-  se detiene en el cumpleaños del nonagenario Wilhelm, un alto cuadro del Partido Comunista de la República Democrática Alemana (RDA), que lo celebra rodeado de la familia, los vecinos y algunos dirigentes del partido. Todo el mundo le lleva flores, un camarada le entrega su enésima condecoración –que, junto con la habitual reseña en el periódico, irá a parar a una caja de latón, baúl de los recuerdos donde este patriarca, que “ha luchado 70 años junto a la clase obrera”, guarda sus “chapas”-  una anciana rusa, expatriada, le regala un frasco de pepinillos, y su biznieto un dibujo. También, como en aquel otro aniversario de la madre que solo veía un trocito de muro desde su cama de enferma, un coro de las “juventudes del partido” le homenajea con una canción que habla de gestas y héroes.

Wilhelm es un estalinista incorregible, con evidentes señales de senilidad. Su hijo Kurt, que vivió el gulag de los desterrados en plena adolescencia en que falleció su hermano, sigue aferrado a los ideales comunista pese a todo. Su nieto Sacha, el más esperado, el preferido del anciano, esta vez no llegará. Fuera, al otro lado de las fronteras de la RDA, en Rusia ha comenzado la perestroika, y Polonia, Checoeslovaquia, Rumania y Bulgaria ya han llevado a cabo sus  pequeñas revoluciones “de terciopelo”.

Mientras Wilhelm hace alarde de una amarga ironía con todos y cada uno de los presentes, en la fiesta con buffet frío en una mesa que se desmorona empieza a circular el secreto del nieto “que se ha pasado a Occidente” (que es lo mismo que decir América según uno de los invitados), y empieza a hacerse patente el clima de represión y silencio, de resentimientos y venganzas aplazadas, cuando la utopía comunista ya se estaba cayendo a pedazos y el Muro de la vergüenza espera el último empujón.

Está muriendo un régimen, agoniza un matrimonio y esa familia está a punto de estallar en pedazos. Las hojas amarillentas de los árboles de Unter den Linden presagian lo que ya está llegando. Más que un relato de la agonía de la RDA « En tiempos de luz menguante » en un retrato de familia, con claroscuros y un humor desesperado. Una fotofija de tres generaciones de alemanes. Bruno Ganz inmenso, como en tantas otras interpretaciones.




viernes, 8 de junio de 2018

El Eliseo quiere pagar su renovación vendiendo souvenirs


« Eliseo-Presidencia de la República » (ÉLysée-Presidence de la Republique) es la marca registrada por el equipo de comunicación de Emmanuel Macrón con el objetivo de recaudar los 100 millones de euros que se han estimado para los trabajos de  renovación programados en el  palacio presidencial, residencia oficial del Presidente e la República.

El pasado 31 de mayo de 2018 fue Patrick Strzoda, director del gabinete del Eliseo, quien protagonizó el acto de depositar el nombre en el registro oficial de patentes y marcas.

Con esa marca, y mediante la ayuda recibida por unos colaboradores especialistas en marketing, van a salir  a la venta tazas, corbatas, lápices, tarjetas postales, bolígrafos y gorras que, antes del comienzo del nuevo curso,  se podrán  encontrar en tiendas de recuerdos y en los puntos de venta efímeros que se instalan habitualmente con motivo de acontecimientos especiales. Y, como no podría ser de otra manera, en una tienda online.  

domingo, 3 de junio de 2018

Unesco: los países piden la devolución de los bienes culturales robados durante la época colonial

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Patrimonio cultural de Benin en Francia
n la Conferencia Internacional sobre el Patrimonio, recientemente celebrada en París bajo los auspicios de la Unesco (agencia de Naciones Unidas para la cultura) varios países africanos pidieron, el 1 de junio de 2018, que les restituyan “los bienes culturales robados”.

“Estos bienes tienen un alma » dijo en la tribuna el presidente de Benín, Patrice Talon. Desde hace 40 años, Unesco viene apoyando el combate de los países, africanos y de otras latitudes, que piden la restitución de sus bienes culturales desaparecidos durante la época colonial, y aboga por “abrir nuevos espacios de diálogo”, entre los países de donde proceden y los que “los conservan” (eufemismo con el que se pretende explicar qué hacen tantas estatuas griegas y egipcias en los museos británicos, por citar solo un ejemplo).

A la Conferencia han asistido ministros procedentes de Senegal, Benín, Gabón , Perú, Líbano, Jordania, Alemania y Francia, así como directores de museos y expertos, que han participado en los debates  sobre un tema “que despierta grandes pasiones y arrastra cuestiones de identidad, memoria o soberanía”, en palabras de la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, exministra francesa de Cultura.

El tema de los objetos culturales “robados” afecta a muchos países de todos los continentes, pero África es el que más: según los expertos, más del 90% de las grandes obras maestras del África Subsahariana se encuentran fuera del continente.

Benín, que es uno de los países más afectados, denuncia los tesoros -tronos reales, puertas sagradas…- acaparados en las batallas coloniales de 1892 y 1894, pero también por los misioneros y las “misiones culturales”: “Más allá de las cuestiones políticas, históricas, sociológicas y filosóficas, la restitución de los bienes culturales serían ahora para el país una forma de luchar contra la pobreza y de crear empleos, una herramienta de desarrollo socio-económico”, según el presidente Talon que sueña con hacer del turismo un pilar de la economía de Benin.