En el Parlamento Europeo, Yulia Navalnaia, la viuda de Alexei Navalny, ha acusado a Putin de ser « el jefe de una organización criminal »

Captura de pantalla de Sky News difundida en Youtube

Este miércoles 28 de febrero de 2024, Yulia Navalnaia, la viuda de Alexei Navalny, ha pronunciado un discurso de diez minutos ante el Parlamento Europeo de Estrasbuego, en el que ha recordado a su esposo –« un inventor que siempre tenía ideas nuevas »-, fallecido repentinamente  el 16 de este mes en la Colonia Penitenciaria del Artico, donde cumplia condena de 19 años por « extremismo », y cuyo funeral está previsto que se celebre el próximo viernes, una vez que las autoridades rusas han devuelto a su madre el cuerpo del difunto.

 “No sé si las obsequias se celebrarán de forma pacífica o si la policía decidirá detener a quienes acudan a despedir a mi marido”, ha dicho Yulia Navalnaia, tras acusar a Vladimir Putin de “matar” a su marido: “Por orden suya, a Alexei le han torturado durante tres años. Le ha hecho pasar hambre en una pequeña celda de cemento (…)  y después le ha matado. Luego, han maltratado su cuerpo y han maltratado a su madre (…) Este asesinato público ha demostrado a todo el mundo que Putin es capaz de todo”. Los diputados europeos en pie han aplaudido el final del discurso, en el que Yulia Navalnaia ha dicho que el presidente ruso es “un bandido que tiene sangre en las manos” y “el jefe de una organización criminal”.

Tras la muerte de Alexei Navalny, su viuda, de 47 años,  quien ya estuvo hace una semana denunciando a Vladimir Putin ante el Consejo Europeo, y después se ha entrevistado en Washington con Joe Biden, ha manifestado que piensa continuar su combate, aunque no entraba en sus planes y se ha visto forzada a hacerlo por los útimos acontecimientos.

Inmediatamente después de su muerte, Yulia Navalnaia publicó una foto en Instagram, en la que estaba besando a Alexei  en la frente, con la leyenda “Te amo”. Su historia de amor ha durado veintiséis años. Nacifa en Moscú en 1976, conoció al joven abogado que sería su marido en una localidad de veraneo turca. Se casaron en 2000, el mismo año que Putin llegó por primera vez al gobierno de la Federación de Rusia. Disidente, Alexei Navalny creó en 2011 una primera Fundación contra la corrupción, contando siempre con el apoyo político de su esposa, quien limitaba sus apariciones a las manifestaciones y campañas electorales. Comenzó a dar entrevistas en los medios cuando, en 2013, Alexei fue detenido: “Comparto sus convicciones y lo imagino como presidente”, dijo en el canal de televisión Dojd, añadiendo que, desde muy pequeña, su hija Dasha decía que su padre trabajaba “luchando contra los estafadores”.   

Cuando, en 2020, Alexey Navalny perdió el conocimiento en un vuelo, tras haber sido envenenado con Novitchock, una sustancia neurotóxica, y el avión hizo un aterrizaje de emergencia en Omsk, Yulia Navalnania “removió cielo y tierra para conseguir trasladarle a Alemania para que le trataran y escribió un correo electrónico a Vladimir Putin para que autorizara el viaje”, según informaba a principios de esta semana el canal público francetvinfo.fr. “Una vez en Europa, estuvo todo el tiempo a su lado y juntos escuchaban la canción Perfect Day, de Duran Duran (…) El 16 de enero de 2021 la pareja voló a Moscú en un avión lleno de periodistas, y Alexei fue detenido nada más bajar, en el aeropuerto de Moscú- Cheremetievo. Esa fue la última vez que Yulia Navalnaia vio a su marido en libertad. Pocos días más tarde, a ella también la detuvieron en una manifestación de apoyo al disidente, aunque inmediatamente la soltaron.

Durante estos años, ha publicado en las redes selfies de su marido en la cárcel y se ha marchado repetidamente de Moscú para llamar la atención de la comunidad internacional. En marzo de 2023, cuando llevaba más de un año sin ver a su marido,  asistió en Hollywood a la ceremonia de los Oscar, donde la película  “Navalny” recibió el Premio al Mejor Documental

 « Con la muerte del opositor –sigue la información de francetvinfo- la suerte de Yulia Navalnaia se puede comparar ahora a la de Svetlana Tikhanovskaia, propulsada al frente de la oposición bielorrusa tras el encarcelamiento de su marido Sergueï Tikhanovski en mayo de 2020. Condenadas al exilio, ambas mujeres se han encontrado a puerta cerrada, sin que se haya desvelado el contenido de sus conversaciones (…) En junio de 2023, la televisión Russia Today, citando fuentes de las fuerzas del orden, aseguraba que Yulia Navalnaia sería detenida si regresaba para asistir al juicio de su marido”

 

Los medios internacionales hacen referencia estos días a la campaña de descrédito lanzada por el Kremlin contra la viuda de Alexei Navalny : Telegram, Pravda y otros medios digitales están difundiendo rumores y falsas informaciones sobre una supuesta infidelidad, y también aseguran que se habría negado a ver a su marido en la cárcel.

 

En las últimas semanas, Yulia Navalnaia ha apoyado públicamente a Boris Nadejdine, un político liberal cuya candidatura a la elección presidencial del próximo mes ha sido anulada por las autoridades.

 

 

El activista ruso Oleg Orlov condenado a dos años y medio de cárcel

Oleg Orlov (Imagen de Human Rights Watch)

Oleg Orlov, conocido activista y defensor ruso de los derechos humanos y uno de los fundadores  de la ONG Memorial, galardonada con el Premio Nobel de la Paz en 2022 por su labor para preservar la memoria de la represión durante la era Soviética, ha sido condenado a dos años y medio de carcel por criticar la invasión rusa de Ucrania.  “Memoria” fue disuelta por la justicia rusa en 2021.

 

En octubre de 2023, en un primer juicio, Oleg Orlov, de 70 años,  fue condenado al pago de una multa por  “desacreditar « al ejército ruso. Este martes, 27 de febrero de 2024, un tribunal de Moscú le ha condenado a dos años y medio de cárcel por denigrar a los militares y por llamar “totalitario y fascista” al régimen de Putin, en un artículo publicado en el periódico digital francés Mediapart.

 

La fiscalía había pedido dos años y once meses de cárcel, en un juicio que comenzó el pasado viernes, 16 de febrero, en Moscú. Antes de entrar al tribunal, el acusado declaró a los medios internacionales que se llegaba “con un espíritu combativo”

 

 Tras pronunciarse la sentencia, Oleg Orlov ha abandonado el tribunal esposado,  y ha sido trasladado a una colonia penitenciaria. Aunque muchos disidentes rusos han elegido el exilio en los últimos años, Orlov siempre ha manifestado su intención de permanecer en Rusia “para continuar el combate”.

“Not a Pretty Picture” de Martha Coolidge: docudrama sobre una violación contada en primera persona

“Es una autobiografía desprovista de narcisismo, un regalo de  una mujer para todos” (Erika Balsom, coeditora de “Feminist Worldmaking and th Moving Image”)

 

En 1962, Martha Coolidge tenía  16 años, y estudiaba secundaria en régimen de internado cuando fue víctima de una violación.  Pasados una docena de años contó aquel episodio en su primer largometraje como directora.

Mezcla de documental, dramatización y reconstrucción de sus recuerdos, la película “Not a Pretty Picture” (No es una película bonita) es una exploración que  la propia Marta Coolidge hace de sí misma  y de las secuelas que le dejó la violación. Todo empezó cuando Martha (Michele Manenti), junto a tres compañeras de clase y un joven de 21 años llamado Curly (Jim Carrington), se trasladron a Nueva York para asistir a una fiesta que se celebraba en un piso alquilado. Los jóvenes bebieron sin control. Sin que los demás se dieran cuenta, Curly se llevó a Martha a otra habitación donde la violó, tras intimidarla, amenazarla y finalmente forzarla a pesar de su resistencia.

La reconstrucción de aquellos hechos – acompañados por una interpretación en el colegio de la canción de amor folk "The First Time Ever I Saw Your Face" (La primera vez que vi tu rostro)- se va alternando con imágenes de los actores y la realizadora hablando y discutiendo acerca de la manera de representarlos. La actriz Michele Manenti (que interpreta a Martha) acaba contando su propia violación cuando era adolescente, y como considera que en realidad fue culpa suya que sucediera porque estuvo coqueteando con el violador; mientras que Jim Carrington (Curly) habla de sus experiencias con otras chicas, incluidos abusos y violaciones que –considera- son « naturales » en los chicos a esas edades.  Anne Mundstuk, la compañera y confidente de la realizadora en el internado, se interpreta a ella misma adolescente y recuerda lo que sintió entonces al saber lo que le había pasado a su amiga. A lo largo del documental, Michele y Martha, directora y actriz,  desmenuzan « las costumbres de una época que humillaba  y culpaba abiertamente a las víctimas. Varias escenas evocan las películas de Hollywood de la juventud de Coodlige –comedias para adolescentes, melodramas, films de horror y comedias musicales- como para sugerir las distorsiones y falsificaciones mediáticas de la vida de las mujeres, de las que su película es un correctivo crucial”  (Richard Brody, The New Yorker).

Aplaudida en su día por una parte de la crítica estadounidense, ahora se anuncia el estreno en España de una versión  restaurada en 4K de aquella película de principiante que ya ha cumplido medio siglo, que ofrece una aproximación realmente prosaica a unos acontecimientos muy emocionantes, que ha permanecido escondida en algún cajón durante los últimos años y que protagonizaron  Michele Manenti, Jim Carrington, .Anne Mundstuk, John Fedinatz, Amy Wright, Stephen Laurier, Hal Studer, Janet Morrison, Reed Birney, y  Diana Gold.

El tema de esta película valiente y honesta es la violación, algo que lamentablemente está de actualidad y sigue llenando páginas de periódicos y espacios televisivos. “Not a Pretty Picture” (1)  acaba con la Martha Coodlige reconociendo que aquel acontecimiento le causó daños que le acompañaron durante mucho tiempo. El resultado es una historia sincera y despiadada que rompe con los esquemas habituales del paso a la edad adulta para ofrecer el relato de una superviviente de violación en el momento en quepuede decirse que empieza a desarrollarse una conciencia feminista y que , en su estreno, en 1976, molestó a una sociedad bienpensante hasta el punto de que fue ignorado por la crítica de periódicos tan importantes como The New York Times y Village Voice (Curiosamente, este último semanario publicó en la siguiente edición un artículo titulado “Violación”).

 

 

 

 

Martha Coolidge, nacida en 1946, guionista y realizadora estadounidense, ex presidenta del Gremio de directores Americanos, ha dirigido entre otras “Valley Girl”, “Rambling Rose”, “El prícipe y yo”, y “Mi promesa”  .  Su serie “Introducing Dorothy Dandrigde “, realizada en 1999 para HBO, fue consagrada como Mejor Realización en los Emy Eawards, y su protagonista,  Halle Berry,  fue elegida Mejor Actriz.

(1) “Not a Pretty Picture” llega a las salas madrileñas el viernes 1 de marzo de 2024.

Navalny fue asesinado cuando existía un acuerdo para cambiarle por un ruso preso en Alemani

Maria Pevtchikh, uno de los miembros del equipo de colaboradores estrechos de Alexi Navalny ha desvelado este lunes, 26 de febrero de 2024, que se estaba negociando su liberación en un intercambio  de presos entre Rusia y Alemania.

Según Pevtchokh, “a principios de febrero se le propuso a Vladimir Putin intercambiar al oficial del FSB y asesino a sueldo Vadim Krasikov, condenado a cadena perpetua  por el asesinato en 2019, en un parque de Berlín, de un ex separatista checheno, por dos ciudadanos estadounidenses y Navalny”. Los estadounidenses, según la publicación Politico, serían el periodista Evan Gershkovich y el ex marine Paul Whelan, ambos acusados de espionaje y cumpliendo condena en Rusia.

La misma fuente asegura que el 15 de febrero le comunicaron que las negociaciones se encontraban en la fase final, por eso se pregunta por qué mataron a Alexei Navalny al día siguiente, precisamente cuando estaba a punto de recobrar la libertad.

En un vídeo publicado en sus redes sociales, Maria Pevchikh explica que llevan dos años negociando un intercambio de presos, entre los que debía encontrarse Navalny, y que « el plan fue aprobado en la primavera de 2023 ». Asegura que Washington y Berlin participaban de la negociación, aunque no ha precisado el papel exacto que jubagan, y ha precisado que tras varios meses en el asunto estancado, “volvió a ponerse sobre la mesa en diciembre pasado”. De momento, ningún portavoz del Kremlin ha reaccionado ante las declaraciones de Maria Pectchikh.

Por su parte Kira Yarmysh, portavoz de la familia Navalny, ha indicado en un mensaje que están buscando un lugar para celebrar el funeral del opositor, cuyo cuerpo fue entregado el sábado a su madre.

 

 

 

“Historias de Tokyo”, de las xilografías al manga pasando por los cerezos en flor

 

Tokyo, antes Edo “la ciudad del Este”, capital de Japón desde 1868,  son varias ciudades en una. Tokyo  tiene varios centros, varias zonas, cada una con su propia personalidad.  Todos los días se producen  terremotos en Tokyo, con carácter catastrófico ocurren cada veinticinco años; pero Tokyo siempre consigue reinventarse.  Durante 400 años  las catástrofes han estimulado  unas respuestas artísticas muy potentes, lo que la convierte en una de las capitales más interesantes del planeta.   Hay muchas maneras de representar el desastre en el arte japonés. En el siglo XIX, después del terremoto que asoló las ciudades de  Anse y Edo en 1885,  “surgió un género fascinante de grabados llamado namazu-e, o grabados de siluro”, en los que aparecen personas enfadadas porque el terremoto les cambió la vida; grabados que también eran una visión humorística  y una denuncia de las condiciones sociales en que quedaba la ciudad después de la tragedia   Cuando Japón se abrió al comercio extranjero, el arte japonés llegó a Europa: Manet, Degas, Van Goh se inspiraron en él arte japonés, en su estética, su perspectiva, sus métodos y su técnica, Pero también ocurrió al reves.  La nueva era Meiji marcó el inicio del modernismo en Japón con la cultura urbana comercial, los grandes almacenes y las compras. Con la segunda guerra mundial el arte se asimiló a la propaganda, la ciudad quedó totalmente destruida, muchos artistas que eran niños cuando los americanos bombardearon Tokyo, en los  años 1960 reflejaban el trauma bélico en sus obras.   En el arte japonés existe también una tradición de tratar lo efímero, la mortalidad (…) el concepto de mono no aware, lo transitorio en la naturaleza y en la vida.   Basado en una gran exposición del museo Ashmolean  de Oxford, el documental « Historias de Tokyo » (Tokyo Stories) –perteneciente a la serie Arte en pantalla (Exhibition on Screen), realizado por el director inglés David Bickerstaff (“Vermeer: la mayor exposición de la historia”- https://aqui.madrid/vermeer-la-mayor-exposicion-de-la-historia-revisitando-al-maestro-indiscutible-de-la-luz/ , “El fascinante mundo del Bosco”, “Goya, un espectáculo de carne y hueso”),  cuenta la evolución de 400 años de arte japonés, en lo que es un  elogio a una de las ciudades más creativas, dinámicas y fascinantes del mundo. Su  estreno en España coincide con un mes clave puesto que el 11 de febrero se conmemora  el día de la Fundación Nacional de Japón y el 23 es el Día del Emperador.   En el documental se encuentran desde las delicadas xilografías  en madera de los artistas Hokusai (siglo dieciocho) e Hiroshige (diecinueve), pasando por los carteles de arte pop, la fotografía contemporánea, el manga y el cine hasta las últimas obras del arte urbano y el Street Art (arte callejero)   En Tokyo, por ejemplo,  trabaja la joven fotógrafa Yuko Mohri, quien ha creado una serie titulada “Gota a gota”, centrada en las estaciones de metro de la megalópolis, en las que aparecen pequeñas goteras causadas por los pequeños terremotos,  que es necesario recoger en cubos, garrafas u otros elementos fortuitos y aleatorios de plástico, que ella considera instalaciones de arte, aunque  han sido creadas por personas que no son artistas. Por eso las ha fotografiado y asegura creer que “la ciudad también existe en esto”.   Y está también   Enrico Isamu Oyama, de madre italiana y padre japonés, que ha creado un estilo propio -entre cultura urbana del grafitti y arte tradicional japonés- de manifestaciones artísticas visuales en distintos soportes.   Estos son solo algunos ejemplos del arte que recogía la exposición de Oxford. La película “Historias de Tokyo” (1) emplea la exposición como plataforma de lanzamiento para viajar a Tokyo y explorar el arte y los artistas de la ciudad., buscando la belleza y los detalles de un lugar en constante renovación. Un recorrido que “pretende destacar la continuidad que existe en el arte japonés  entre el pasado y  el presente, que el arte japonés va mas allá del manga, las xilografías centenarias y las flores rosas de los cerezos.  Hay arte en todo eso, pero también en todo lo demás:  artistas, fotógrafos, grafistas, paisajistas, dibujantes, calígrafos, animadores…

 

(1) “Historias de Tokyo” se estrena en los cines de Madrid el lunes 26 de febrero de 2024. 

 

 

 

Berlinale : Oso de Oro para el documental « Dahomey » de la realizadora franco-senegalesa Mati Diop

Con el argumento de la espinosa cuestión de las obras de arte africanas robadas por las antiguas potencias coloniales –muchas de las cuales todavía se exhiben en museos europeos- la realizadora franco senegalesa de 42 años Mati Diop ha conseguido ganar el Oso de Oro en la 74 edición del Festival Internacional de Cine de Berlín (Berlinale), clausurado el pasado sábado, 24 de febrero de 2024.

 

“Podemos –ha dicho Mati Diop al recoger el premio- olvidar el pasado, una carga desagradable que nos impide evolucionar, o podemos asumir la responsabilidad y utilizarla para avanzar. En tanto que franco-senegalesa, cineasta afrodescendiente, yo he elegido ser de quienes se niegan a olvidar, de quienes rechazan la amnesia como método”.

 

El documental “Dahomey” cuenta la devolución a Benin, en noviembre de 2021”. De 26 obras robadas en 1892 por las tropas coloniales francesas. La historia está narrada por la voz en off de la estatua del rey Ghézo que en lengua fon (oficial en Benin) se lamenta de no poder ser conocido por su nombre, solamente por un número “el 26”, en el Museo del Quai Branly de París. Después cuenta su vida, su exilio, y su reciente repatriación a un museo en Cotonou, la capital de Benin. La realizadora ha lamentado que solo se hayan devuelto 26 piezas “de las siete mil obras que continúan cautivas” en el museo parisino.

 

Mati Diop, hija del músico senegalés Wasis Diop y de madre artista, nació y creció en París y en 2019 consiguió ganar el Gran Premio en el Festival de Cannes con la película  « Atlantique », la historia de unos obreros de Dakar a los que no pagan el salario desde hace meses y deciden lanzarse al océano en busca de un futuro mejor.    

 

El jurado de la 74 Berlinale, presidido por la actriz mexicano-keniana Lupita Nyong'o,  ha entregado también el Premio a la Mejor Interpretación al actor rumano-estadounidense Sebastian Stan, protagonista de la película “A Different Man” (desde el año pasado la Berlinale no distingue entre actores y actrices, entregando un único premio de interpretación) del realizador Aaron Schimberg,  el Gran Premio del Jurado al sudcoreano Hong Sang-soo son por “A Traveller’s Needs”, película que interpreta Isabelle Huppert; y el Premio del jurado a “L’Empire” del realizador francés Bruno Dumont.

 

Las autoridades rusas han entregado el cuerpo de Alexei Navlany a su madre

Alexei Navalny, muerto en la cárcel

Tras una semana reclamando el cuerpo de su hijo Alexei Navalny, finalmente las autoridades rusas han accedido a entregárlo  a su madre, Liudmila Navalnaia, según ha informado a la prensa internacional un miembro del equipo del “enemigo número 1 de Putin”, fallecido repentinamente el pasado 16 de febrero de 2024, en la colonia penitenciaria del Artico donde se encontraba cumpliendo una condena de 19 años por “extremismo”.

Hasta ahora, las personas cercanas a la familia, así como los miembros de su equipo,  aseguraban que responsables de la institución penitenciaria estaban presionando a la madre de Navalny para que accediera a enterrarle en secreto. Kira Iarmich, portavoz de la familia, ha manifestado en X su agradecimiento a las decenas de personalidades rusas que, en los últimos días, han pedido a las autoridades que devolvieran el cuerpo, entre los que se encontraban el  Premio Nobel de la Paz y periodista Dmitri Mouratov, el realizador Andreï Zviaguintsev, el escritor Viktor Chenderovitch y Nadejda Tolokonnikova, integrante del grupo contestatario  Pussy Riot y militante anti-corrupción.

"Cuesta tener que decir esto en un país que se considera cristiano, pero devolved a Liudmila Ivanovna (La madre de Navalny) el cuerpo de su hijo », escribió Dmitri Muratov, redactor jefe de la publicación independiente Novaya Gazeta.    

“Putin ha tenido miedo de Navalny muchas veces durante su vida, y Putin tiene miedo de Navalny después de su muerte; tras matar a Navalny sigue temiéndole”, dijo el escritor Chenderovitch, a quien Moscú incluye en su lista de “agentes del extranjero” por sus críticas contra la invasión de Ucrania.

 

La sombra de Putin es alargada 

 

Alexey Navalny es solo la penúltima de las víctimas que va dejando tras de sí el dictador Vladimir Putin desde que accedió por primera vez al gobierno de la Federación de Rusia, hace ya más de veinte años, en 2000. Ahora, en su segundo mandato consecutivo desde 2012, se encuentra  en vísperas de una elección presidencial prevista para el próximo mes de marzo.

 

La última de sus víctimas  es el joven de 28 años Maksim Kuzminov, piloto del ejército ruso que la policía española encontró, acribillado a balazos, el 21 de este mes de febrero en un parking subterráneo de la localidad alicantina de Villajoyosa.

 

Enviado a combatir en Ucrania, Kuzminov desertó el pasado mes de agosto, entregando el helicóptero que pilotaba al ejército ucraniano. El joven piloto declaró haber cambiado de campo porque estaba en contra de la guerra que Rusia tiene declarada a Ucrania, y aseguró que el gobierno de Ucrania le había prometido medio millón de dólares, una documentación nueva y protección para su familia, que ya se encuentra fuera de Rusia.

 

Kuzminov  recibió amenazas de muerte en los medios rusos después de que los servicios secretos ucranianos revelaran detalles de su deserción, y el director del Servicio ruso de inteligencia Exterior (SVR), Serguei Narychkine, declaró en el diario oficial Pravda que el piloto era “un cadáver moral”.

 

 

 

 

La viuda de Navalny, Yulia Navalnaia, recibe en San Francisco el pésame de Joe Biden

Documental sobre Navalny de Filmaffinity

Mientras en Rusia la madre de Alexei Navalny ha presentado, ante un tribunal del Gran Norte, una denuncia para conseguir que le devuelvan el cuerpo de su hijo –denuncia que será examinada, en una vista a puerta cerrada  el próximo 4 de marzo en Salekhard, la ciudad más cercana a la colonia penitenciaria del Artico donde Navalny cumplia una condena de 19 años, y donde falleció el 16 de febrero pasado-  en San Francisco (California, Estados Unidos), la viuda del opositor, Yulia Navalnaia, de 47 años,  recibía, junto a su hija Dasha, estudiante en la Universidad de Stanford de 23 años, un fuerte abrazo y las condolencias del presidente estadunidense, Joe Biden, quien ha responsabilizado a Putin de la muerte del opositor y ha anunciado, como represalia,  un nuevo paquete de medidas contra Rusia.

 

Según la Casa Blanca, durante la reunión Biden expresó su "admiración" por el "extraordinario valor" de Navalny así como  por "su legado de lucha contra la corrupción y por una Rusia libre y democrática en la que el Estado de Derecho se aplique igualmente a todos".

 

El equipo de Navalny sigue acusando al Kremlin de su muerte y de esconder su cuerpo para impedir cualquier intento de hacer una investigación independiente. Feroz opositor de Vladimir Putin –al que acusó de corrupto tras desvelar la lujosa mansión, con grifos de oro entre otras horteradas, que el amo de Rusia se ha construido la isla de Gelendzhik, en el Mar Negro- Alexei Navalny falleció repentinamente al regresar a la cárcel tras un paseo junto a otros presos. Preso desde 2021 y condenado a 19 años por “extremismo”, era conocido por su combate contra la corrupción de las élites del régimen ruso, que denunciaba a través de su ONG Fundación Anticorrupción (FBK). En agosto de 2020 fue víctima de un envenenamiento con Novitchok, un poderoso agente tóxico, al que sobrevivió milagrosamente.

 

La notoriedad de Navalny, abogado, casado, padre de dos hijos y ortodoxo practicante, ha ido creciendo en los últimos años a medida que se sucedían sus detenciones y condenas. Su popularidad se inició en 2007, con una cruzada anticorrupción en la red social LiveJournal  y, a partir de 2009, en su blog personal Rospit. En 2010 acusó al gigante energético ruso Transneft, de desviar cuatro millones de dólares en la construcción de un gigantesco gasoducto desde Siberia al Océano Pacífico.

 

En 2011 fundó el FBK, con el objetivo de denunciar irregularidades en las sociedades públicas y la corrupción en los grandes consorcios rusos. Las investigaciones de sus equipos, siempre muy documentadas, consiguieron millones de visitas en YouTube al tiempo que molestaban a los oligarcas y políticos rusos. Tras salvar varias obstrucciones administrativas y ser objeto de una investigación por “blanqueo”, en octubre de 2019 congelaron las cuentas del FBK y el ministerio de Justicia incluyó a la organización en la lista de “agentes del extranjero”.

 

Al mismo tiempo, Alexei Navalny se fue implicando cada vez más en política, combatiendo directamente al partido de Vladimir Putin, que llamaba “el partido de los ladrones y estafadores”, y su activismo empezó a costarle diversas citaciones judiciales y campañas en las que llegaron a acusarle de ser un agente de la CIA. En 2012 le condenaron a 15 días de cárcel tras un enfrentamiento con la policía en una manifestación, y en 2014 fue condenado a un año de arresto domiciliario, junto a su hermano Oleg. Acusados ambos de desviar cerca de 400.000 euros, en detrimento del fabricante francés de cosméticos Yves Rocher, fue condenado a tres años y medio de cárcel, con la ejecución de la pena en suspenso. En diciembre de aquel año violó el arresto domiciliario asistiendo a una manifestación delante del Kremlin.

 

Antes, en 2013, presentó su candidatura a la alcaldía de Moscú y consiguió el 27% de los votos. En 2018, la Comisión Electoral Central rechazó su candidatura a la elección presidencial, alegando que tenía pendiente una condena en suspenso, y declaró que no podría presentarse  a ningún cargo público hasta 2028.  Cuando preparaba una campaña para las legislativas de septiembre de 2020, el 20 de agosto fue envenenado perdiendo el conocimiento cuando volaba de Siberia a Moscú. Trasladado a Alemania para seguir un tratamiento contra el Novitchok, el 17 de enero de 2021 regresó a Rusia, siendo detenido en el aeropuerto de Moscú ante las cámaras de televisión del mundo entero y encerrado en una cárcel cerca de la capital.

 

Tras unos meses desaparecido, a finales de diciembre de 2023 aparece en las redes sociales anunciando que ha sido trasladado a una colonia penitenciaria en el Artico. El 1 de febrero de 2024, en lo que sus seguidores consideran un legado político, Alexei Navalny llamó a organizar manifestación durante la elección presidencial, anunciada para los días 15 al 17 de marzo próximo: “Acaricio la idea –escribió- de que todos los que voten contra Putin acudan a las urnas a la misma hora, a mediodía. Mediodía contra Putin”.

 

 

 

La madre de Alexei Navalny acusa al Kremlin de querer enterrarle en secreto.

Alexei Navalny

Según la información publicada este jueves en la edición francesa del digital Huffington Post, la madre de  Alexeï Navalny, principal opositor de Vladimir Putin muerto el viernes 16 de febrero de 2024 en la cárcel, dice que por fin ha podido ver el cuerpo de su hijo y acusa a las autoridades rusas de chantajearla para enterrarlo en secreto: « Me chantajean, (...) quieren que todo se haga secretamente, sin ceremonia, quieren enviarme a los confines de un cementerio, cerca de una tumba reciente y decirme que ese es mi hijo. Yo no estoy de acuerdo », dice Liudmila Navalnaia, en un vídeo difundido este jueves 22 por el equipo del opositor.

La madre de Navalny, quien asegura que se encuentra en Salekhard, la capital del distrito de Iamalo-Nenetsie, donde su hijo falleció mientras se encontraba detenido, dice que le han llevado a  la morgue, donde ha visto el cadáver y donde están preparados “todos los documentos jurídicos y médicos” de la muerte que, según el equipo de Navalny, certifican la muerte como “natural”.

“Legalmente –ha dicho la madre- tendrían que  haberme entregado el cuerpo de Alexei inmediatamente, pero no lo ha hecho. En lugar de eso, me chantajean. Grabo este vídeo porque han empezado a amenazarme. Docen que su me niego a los funerales secretos, harán cualquier cosa con el cuerpo. El investigador me ha dicho abiertamente que el tiempo juega en contra mía porque el cadáver se descompone. Yo quiero que puedan decirle adiós todos cuantos le querían y para quienes su muerte es una tragedia personal”..

Cuando ha pasado casi una semana de la muerte de Navalny, su madre se ha dirigido al presidente de Rusia, Vladimir Putin, pidiéndo que le entregue su cadáver.

El lunes pasado, la esposa del fallecido, Yulia Navalnaia, acusó a Putin de haber matado a su marido; una acusación que negó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, calificándola de “grosera y totalmente infundada”. Lo que ha su vez ha provocado un mensaje en X deYulia Navalnaia, muy enfadada: “Me da igual lo que el portavoz de un asesino opine de mis palabras. Devolvednos el cuerpo de Alexei y dejadnos enterrarle dignamente, no impidáis que la gente pueda despedirle”.