«Boko
Haram recluta jóvenes de 14 años en adelante. Condiciones del reclutamiento:
haber aprobado 4 materias y la religión del bachillerato”. Por enviar este
sms sarcástico la víspera de los exámenes, Fomusoh Ivo Feh y dos de sus amigos,
han pasado dos años en prisión y ahora les condenan a 10 años de cárcel.
Amnistía
Internacional (AI) tiene en marcha una campaña de recogidas de firmas para
pedir al presidente der Camerún, Paul Biya, la libertad de los tres
estudiantes. Para AI, un caso como este demuestra que “Camerún utiliza la lucha
antiterrorista como un pretexto falaz para hacer detenciones arbitrarias y
restringir la libertad de expresión de los ciudadanos”. Detenciones, torturas,
ejecuciones…Cientos de testimonios recogidos por los investigadores de AI
prueban el clima de violencia y abuso de poder que han creado las fuerzas de
seguridad”.
Fomusoh
Ivo Feh y sus amigos Afuh Nivelle Nfor y Azah Levis Gob son considerados
culpables de «no denunciar actos terroristas». Detenidos desde 2014 por
compartir un mensaje de broma sobre Boko Haram, el tribunal militar de Yaundé
les condenó en octubre de 2016 a diez años de cárcel. Para AI, los jóvenes
“deben quedar en libertad inmediatamente, y sin condiciones. Las exigencias de
la seguridad nacional y la lucha contra Boko Haram no pueden servir de pretexto
para violar el derecho de la población camerunesa a la libertad de expresión”.
La
ley antiterrorista, aprobada en diciembre de 2014, autoriza a los tribunales
militares a condenar a las personas detenidas en el marco de la lucha
antiterrorista. AI ha denunciado repetidas veces los procesos conducidos por
estos tribunales, por su falta de independencia e imparcialidad y la falta de
garantías de un juicio justo.
«La
tragedia que viven estos jóvenes carece de sentido. Reprimir el humor no va a
servir en ningún caso para vencer a Boko Haram y constituye un grave atentado a
la libertad de expresión. Esta regresión ciega tiene que terminarse”.
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