Hacía mucho tiempo que no veía una película como “Devotion. Una historia de héroes”, más propia del ecuador del siglo veinte; una película de guerra y solo de guerra, una película de hombres y solo de hombres (las única mujeres que aparecen son la esposa y la hija de uno de los pilotos protagonistas, y lo hacen con carácter episódico, si bien su presencia sirve para acentuar el aspecto familiar). Una película épica dirigida por J.D. Dillard (“Sweetheart”, “Juegos de manos”) que narra la amistad de dos pilotos de caza de la marina estadounidense –uno de ellos el primer aviador afroamericano- que combatieron en la primera fase de la Guerra de Corea.
Basada enla novela de Adam Makos « Devotion: An Epic Story of
Heroism, Friendship, and Sacrifice », es una película espectacular por
la cantidad de secuencias de aviones evolucionando en el aire y combatiendo -escenas
de una intensidad nunca vista
anteriormente en el cine-, así como de aterrizajes en la cubierta del
portaviones, protagonizada por Glen Powell (“Top Gun: Maverick”, “Figuras
ocultas”, “Castillo de arena”, “The Bad Guys”) y Jonathan Majors (“Da 5 Bloods:
Hermanos de armas”, “White Boy Rick”, “The Last Black Man in San Francisco”, “Nación
cautiva”).
Relato de hechos reales, “Devotion. Una historia de héroes” (1)
es un drama histórico ocurrido en 1950, en plena Guerra Fría, con dos
protagonistas procedentes de ambientes sociales muy diferentes,que coincidieron
en el escuadrón de élite VF-32 –Tom Hudner (Glen Powell en el filme), un
oficial de carrera, y Jesse Brown
(Jonathan Majors), un talentoso piloto y primer hombre negro en la Air Force,
un universo dominado por jóvenes WASP (blancos, de origen anglosajón y de
religión protestante)- y se convirtieron
en unos de los mejores pilotos de combate de la US Navy al tiempo que consolidaron
una sólida amistad, que se vio puesta a prueba cuando Jesse Brown resultó
abatido en territorio enemigo.
Película muy “clásica” y convencional, pero sin duda eficaz,
sobre la amistad y los derechos civiles, no olvida apuntar el racismo dominante
en aquel tiempo y en lugares como el ejército: según algunos historiadores, el
piloto Brown fue objeto de lesiones corporales y varios intentos de asesinato por
parte de “compañeros” segregacionistas en los comienzos de su carrera.
Confieso haberme sentido confusa con los créditos finales de
la película, que aseguran que el piloto Hudner ha estado durante años
intentando regresar a Corea para recuperar el cuerpo de su compañero caído en
combate, cuando en la película se dice que hay orden del mando de destruir los
aparatos de ambos, estacionados en un claro del bosque helado, donde tuvo que
hacer un aterrizaje de emergencia el piloto Brown cuando empezó a arder el
depósito de aceite de su caza.
(1) « Devotion.
Una historia de héroes » se estrena en los cines de Madrid el viernes 27
de enero de 2023.
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