El 12 de octubre, poco después de
las 16h, el avión utilizado por el gobierno de Kazajstán (un Boeing 737)
aterrizó en Ginebra. Tres días antes, el 9 de octubre, un A320 de la familia
real de Qatar, se posó en el mismo aeropuerto pocos antes de las 15h. Despegó
al día siguiente a las 9:11h. Estas informaciones proceden del bot (1) de
twitter creado por el periodista de investigación suizo François Pilet y un
pariente informático, para “cazar” los aviones que llegan de regímenes
dictatoriales. Desde su puesta en funcionamiento, en abril de 2016, Dictator
Alert @GVA Watcher (2) ha registrado más de 60 idas y venidas.
Pilet decidió crear esta alerta
para “hacer un poco de trasparencia en un mundo muy secreto” al comprobar que
la familia Obiang, que impera en Guinea Ecuatorial de manera dictatorial, y a
la que el gobierno español no le hace ascos, efectuaba frecuentes viajes a la
ciudad suiza, siempre en un Boeing, compañía que tiene prohibido volar a la
Unión Europea. Sobre este asunto, Pilet publicó un artículo en la revista
L’Hebdo, según una información del sitio estadounidense The Verge
(theverge.com) (3), reproducida en el digital francés Rue 89, perteneciente al
grupo de L’Obs (anteriormente Le Nouvel Observateur).
Pilet reconoce que algunos de los
dictadores que ha “cazado” podrían tener motivos legítimos para viajar a
Ginebra -en la ciudad se encuentran la Organización de Naciones Unidas (ONU) y
otros organismos internacionales- pero también podría ser que fueran "para
eludir pagar impuestos o blanquear dinero”, escribe The Verge.
El artículo de Pilet, llevaba por
título “Gracias a Suiza, un avión del régimen dictatorial de Guinea Ecuatorial
escapa a la prohibición de vuelo europea”, una frase que lleva implícita la
pregunta: ¿cómo es posible que esto ocurra? (aunque Suiza no pertenece a la
Unión Europea, distintos acuerdos entre el gobierno helvético y los responsables
de la UE hacen que el pequeño país siempre “neutral”, que tiene fronteras con
Francia, Alemania e Italia, respete este tipo de prohibiciones; de no hacerlo
estaría en conflicto permanente con sus vecinos).
Pilet responde a la pregunta
recordando las conexiones diplomáticas de su propietario, Teodoro Obiang
Nguema, uno de los peores dictadores y cleptócratas de Africa, que lleva
treinta y tres años reinando sobre su minúsculo petroestado. El presidente y su
familia se sienten muy a gusto en Ginebra, a donde sus aviones privados van y
vienen desde Malabo a un ritmo desenfrenado, a pesar de las numerosas investigaciones
por corrupción que se han llevado a cabo en Francia, Estados Unidos y la propia
Suiza. El patriarca, su esposa Constancia y su hijo Teodorín saben que siempre
son bien recibidos a orillas del lago (…)" y no como en París o
Washington”, donde la justicia estadounidense les embargó, en 2011 y por
sospechas de corrupción y desvío de fondos públicos, 70 millones de dólares,
una villa en Malibú, un jet privado, un Ferrari y una colección de objetos que
habían pertenecido a Michal Jackson. Al año siguiente, tras un escándalo por
"bienes mal adquiridos" denunciados por varias ONG’s, la justicia
francesa embargó el apartamento de 4.000 metros cuadrados de Obiang en la muy
exclusiva Avenue Foch, así como una colección de coches de lujo. Teodorín ha
recurrido su procesamiento alegando inmunidad, ya que es vicepresidente segundo
de su país. Todos los gastos del fabuloso tren de vida de la familia que manda
con puño en Guinea Ecuatorial, estaban administrado por sociedades pantalla
suizas.
Las visitas de los Obiang a Ginebra
han continuado a pesar de que el gobierno francés pidió al suizo que
interviniera. Como demuestra la investigación de Pilet, los cuatro jets
privados y los varios Boeing residen casi permanentemente en las pistas del
aeropuerto de Cointrin. Está el Boeing de papá, un 737 Utonde que lleva el
escudo de la república, y que ha aterrizado once veces en Ginebra desde el 1 de
enero de 2015, pasando allí en total 86 días. El jet Dassault 900 de Teodorín -un
regalo de cumpleaños- que estuvo ocho veces en Ginebra, para un total de 69
días. Y otro Falcon 50, idéntico al embargado por la justicia francesa, que ha
permanecido 83 días en el aeropuerto, en nueve viajes. “Pero esto no es todo.
Un gran Boeing 767-306 ER hace de lanzadera entre Ginebra y Malabo, al parecer
trasladando a Constancia, la mujer del tirano, que pasa períodos de curas en Suiza,y
llevando los colores de una compañía civil ecuatoguineana, CEIBA
Intercontinental, que desde 2012 figura en la lista negra de la Unión Europea.
Entre el 1 de enero de 2015 y el 21 de e de 2016, el Boeing 767 de CEIBA
Intercontinental estuvo cinco veces en Ginebra y pasó un total de 51 días en las
pistas del aeropuerto, saltándose la prohibición europea acatada por Suiza
“mediante la demanda de una autorización diplomática para un vuelo de estado”.
(1) Un “bot” es una entidad
informática independiente que efectúa acciones por propia iniciativa. Un bot
puede ser también, por ejemplo, un programa de vigilancia (en este caso,
supongo, las llegadas y salidas del aeropuerto de Ginebra).
(2) Dictator Alert @GVA_Watcher
This TwitterBot is tracking planes
used by authoritarian regimes landing at Geneva Airport. Project by @julienpilet
and @FrancoisPilet
Geneva, Switzerland
(3) The Verge es un multimedio
estadounidense de noticias tecnológicas, operado por Vox Media, que divulga
noticias, artículos de fondo, reseñas de productos, podcasts…, que se financia
a través de anuncios y patrocinadores desde el 1 de noviembre de 2011. El sitio
web utiliza su propia plataforma para la publicación con contenido de vídeo [The
The The Verge ganó cinco premios Webby en 2012, incluyendo premios a la mejor
redacción, el mejor podcast para The Vergecast, mejor diseño visual, mejor
sitio de electrónica de consumo y mejor aplicación móvil de noticias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario