Embarrancados en un islote minúsculo durante
cerca de diez horas, cinco personas han conseguido salvarse gracias a un SOS
gigante escrito en la arena frente a la costa de Queensland.
Parece
una película. Dos mujeres y tres hombres australianos que habían decidido
bucear en una isla desierta, largaron el ancla de su barco y descendieron a
tierra. Con tan mala suerte que el ancla se rompió y el barco fue a la deriva,
llevado por la marea creciente, según ha informado el diario británico The
Independent y ha recogido el digital Aufaitmaroc.fr. Los cinco australianos se
encontraron “solos en el mundo” durante más de nueve horas en un islote que no
es más que un puñado de tierra cubierto de rocas y un banco de arena. Uno de
ellos tuvo la feliz idea de escribir SOS, con letras gigantes, en la dorada
arena.
“No
teníamos ni comida, ni agua, ni sombreros, ni crema solar, nada de nada.
Llegamos incluso a buscar el mejor lugar entre las rocas para poder
resguardarnos y permanecer juntos”, ha dicho uno de los supervivientes de la aventura
al diario británico.
Al
cabo de cinco horas, alguien avistó el barco a la deriva, sin nadie a bordo. La
policía contactó entonces con el servicio de salvamento marítimo, para que
iniciara la búsqueda de los pasajeros. Tres horas más tarde, esos mismos
equipos se fijaron en el gigantesco letrero que pedía socorro cerca de la isla
Wigton.
«Vimos
un helicóptero que enseguida desapareció. Pensamos que no nos había visto y
decidimos buscar un lugar para pasar esa noche. Al cabo de veinte minutos
reapareció”, ha dicho el navegante Craig Gilbert a ABC News.
Al
parecer, aparte algunas quemaduras solares y pequeñas heridas, los cinco
náufragos se encuentran bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario