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Segundo largometraje de la
realizadora de “Adam”, “El caftán azul” (Le bleu du caftan), Premio de la
crítica internacional en el Festival de Cannes 2022, finalista en el
próximo Premio Oscar en representación de Marruecos cuya protagonista, la
actriz belga Lubna Azabal (Incendies, Todo pasa en Tel Aviv), fue elegida
Mejor Actriz en la pasada edición de la Seminci de Valladolid. Completan el
trío de actores el palestino Saleh Bakri (Invitación de boda) y el
debutante marroquí Ayoub Missioui.
Delicada y valiente historia
de amor, miedos y traiciones que reivindica la liberta de amar por encima
de géneros, confesiones y tradiciones, “El caftán azul” (1) nos cuenta la
peripecia vital de Halim, quien lleva mucho tiempo casado con Mina. Juntos
regentan una tienda de caftanes tradicionales en la medina de Salé, una de
las más antiguas de Marruecos. Halim es el artista que recrea bordados ancestrales.
La pareja guarda un pesado secreto, que se ve amenazado por la enfermedad
de Mina y la incorporación a la tienda de un joven aprendiz.
Una historia audaz en un
país muy conservador donde la homosexualidad es un tabú que su código penal
castiga con penas de cárcel de seis meses
a tres años. “Mi película –dice la realizadora Maryan Touzani, 42
años- puede contribuir a crear un debate necesario y sano sobre esta
cuestión (…) Me duele ver como personas LGTB+ viven escondidas con el miedo
de que la expresión de su amor sea negada y juzgada”
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